¿Estás desarrollando tu primer Minimum Viable Product (MVP)? ¡Felicidades por dar el primer paso para emprender! Sin embargo, hay un error común al crear MVPs que puede limitar la eficacia y el éxito de lo que estás intentando construir. Ese error es la sobrecarga de funcionalidades. En este artículo, explicaremos todo lo que necesitas saber sobre cómo evitar la sobrecarga de funcionalidades en tu MVP.
Comenzamos con los fundamentos. Un MVP es un producto mínimo viable. Es una versión temprana de tu producto/servicio que contiene las funcionalidades esenciales necesarias para validar tu idea de negocio con un grupo pequeño de usuarios. En otras palabras, un MVP te ayuda a probar si hay demanda para tu producto/servicio antes de invertir tiempo y dinero en desarrollar todo el sistema.
El objetivo principal del MVP es aprender. Al recibir retroalimentación sobre el MVP, tendrás una mejor comprensión de las necesidades de tus usuarios y podrás mejorar en consecuencia. Por lo tanto, el MVP no es una versión completa de tu producto/servicio. Más bien, es un primer paso en el camino hacia la versión final de tu producto/servicio.
Crear un MVP no significa simplemente empacar todas tus ideas en un solo producto/servicio. Si tratas de implementar todas las funcionalidades que has imaginado, acabarás creando algo muy complejo y difícil de entender. Como resultado, puede ser difícil para los usuarios entender cómo funciona el producto/servicio lo que llevará a una mala experiencia del usuario. Además, al agregar demasiadas cualidades al MVP, se vuelve difícil recibir retroalimentación valiosa ya que la retroalimentación se pierde en la complejidad del sistema.
La sobrecarga de funcionalidades también puede atrasar considerablemente el desarrollo de tu MVP. Cuanto más complejo sea el MVP, más tiempo tardarás en terminarlo y en mostrarlo a los usuarios. Es importante recordar que el MVP debe ser lo suficientemente simple como para que puedas llegar rápidamente al mercado y comenzar a validar la idea de negocio. No debes perder el ritmo por el camino.
Sigue estos consejos prácticos para evitar la sobrecarga de funcionalidades en tu MVP:
Comprende lo que tus usuarios buscan y qué problema estás tratando de resolver. En lugar de concentrarte en implementar "todas las funcionalidades", enfócate en agregar solo aquellas que resuelven el problema principal de tus usuarios de la manera más simple posible.
Establece objetivos claros para tu MVP. ¿Qué estás tratando de lograr con él? ¿Cuál es el resultado que deseas obtener con el MVP? Una vez que hayas establecido tus objetivos, enfoca tu atención en las funcionalidades que impulsarán esos resultados.
Es importante que seas selectivo y priorices las funcionalidades. Puedes hacer esto preguntándote si cada función es necesaria para la primera versión de tu MVP o si puedes realizar una prueba sin ella. Elimina todas las funcionalidades que no sean esenciales en estos momentos. Una manera efectiva de priorizar es construir un mapa de características para mostrar las funcionalidades esenciales y las no esenciales.
En lugar de basar tus diseños en “lo que piensas que es bueno para el usuario”, concéntrate en el comportamiento del usuario en tu producto/servicio. Considera cómo los usuarios interactúan con la aplicación y utiliza esa información para guiar tus diseños. Esto te ayudará a concentrarte en las características más importantes y relevantes para los usuarios.
Crea una lista de comprobación para la funcionalidad de tu MVP. Haz una lista de todas las funciones que planeas agregar al MVP y verifica si estas funciones soportan o no los objetivos que estableciste antes. Si alguna función no es necesaria, quítala de la lista.
Es recomendable comprometerse con tus deseos para mantener tu MVP tan delgado como sea posible. Algunas de tus funcionalidades favoritas podrían no estar listas para la primera versión de tu MVP. Mantente abierto a cambios y dispuesto a dejar ir algunas características antes de que el MVP sea lanzado.
En resumen, evitar la sobrecarga de funcionalidades en tu MVP es crucial para el éxito de tu negocio. Crea una lista detallada de lo que tus usuarios necesitan, enfócate en los objetivos de tu negocio, prioriza las funcionalidades, diseña según el comportamiento del usuario, haz una lista de comprobación para la funcionalidad y sé flexible con tus deseoDe esta manera, tu MVP será más fácil de utilizar, recibirás retroalimentación valiosa y podrás experimentar con nuevas ideas. En última instancia, un MVP más delgado puede ser más fácil de mejorar, lo que es esencial cuando estás buscando crecer tu negocio.